La erosión costera afecta a dos tercios de las playas de Marruecos, especialmente en Tánger, donde este fenómeno podría provocar la pérdida del 99 por ciento de las infraestructuras portuarias y el 63 por ciento de la zona industrial de esta ciudad para 2030, según las proyecciones del Banco Mundial.
El 42 por ciento de las costas de Marruecos están amenazadas por la erosión incluidas playas y zonas de Tánger-Tetuán-Alhucemas.